Estrategias para la gestión del capital humano

La gestión del capital humano es esencial para crear equipos de trabajo eficaces y dinámicos. Es un proceso que tiene como objetivo desarrollar, gestionar y retener los recursos humanos para alcanzar los objetivos de una organización. En este post, te contamos qué tienes que tener en cuenta para abordarlo correctamente. ¡Sigue leyendo!

 

Tabla de contenidos

¿A qué nos referimos cuando hablamos de capital humano?

Tipos de capital humano

¿Cómo gestionar el capital humano de tu empresa?

 

¿A qué nos referimos cuando hablamos de capital humano?

El capital humano es el conjunto de recursos humanos, la suma de conocimiento, habilidad y experiencia que tiene una organización para generar valor a través del trabajo. Es decir, cualquier persona que trabaje en una compañía puede ser considerada parte del capital humano. Se lo considera un activo intangible, aunque puede ser medido y controlado para aumentar la productividad en el espacio de trabajo y alcanzar objetivos específicos.

Vale la pena mencionar que este tipo de activo intangible es el más importante de todos los que existen dentro de una empresa, ya que sin el capital humano no podríamos producir los bienes o servicios que comercializa la empresa.

De allí la importancia de realizar estrategias para optimizarlo y obtener mayores beneficios en la cadena de producción.

Tipos de capital humano

El capital humano puede ser medido y gestionado para lograr equipos más dinámicos, productivos, y enfocados en los objetivos generales que persigue la empresa. Pero antes de siquiera pensar en gestionar el capital de humano de tu organización, es importante que conozcas los distintos tipos de capital humano que existen:

  • Capital intelectual: Es el conjunto de conocimientos y habilidades que posee una persona para desempeñar un puesto de trabajo.
  • Capital social: Podemos definirlo como la suma de relaciones personales y contactos profesionales que se tienen en un determinado sector laboral.
  • Capital cultural: Es el conocimiento que posee una persona sobre las costumbres, valores y tradiciones de su cultura. Se puede definir como la información acumulada por una sociedad durante su historia.
  • Capital físico: Se refiere al equipamiento y accesorios utilizados para desarrollar la actividad empresarial o laboral.

Teniendo en cuenta estos cuatro tipos de capital humano, podemos planificar y ejecutar estrategias que le permitan a tu empresa crecer.

¿Cómo gestionar el capital humano de tu empresa?

La gestión del capital humano es una de las herramientas más importantes para la toma de decisiones en la empresa. Permite que los empleados sean personas con experiencia y conocimientos que pueden ayudar a su empresa a crecer y mejorar tanto su producción como su clima organizacional.

Aunque puede ser una tarea muy compleja, implica entender las necesidades y expectativas de los trabajadores, además de conocer cómo están trabajando y qué mejoras se podrían implementar.

El capital humano debe ser tratado como cualquier otro activo de la empresa. Es decir, hay que cuidarlo como tal y gestionarlo correctamente para lograr el máximo rendimiento posible. Para ello, es necesario entender el proceso de gestión de recursos humanos de una empresa. A continuación, te contamos cómo puedes mejorar tu estrategia para gestionar de forma eficiente el activo humano de tu empresa:

1. Invierte en capacitación

La capacitación es una parte importante del desarrollo de los empleados. El capital humano no es una inversión menor, por lo tanto, debes estar preparado para invertir dinero en la formación y el aprendizaje de los trabajadores cuando llegue el momento. 

Para mantener alto el nivel de productividad de tu empresa es importante que tus empleados se encuentren actualizados en sus funciones y sepan aprovechar todos los beneficios que te proporciona la tecnología y las herramientas de trabajo que necesitan para funcionar. En AmunTalent, ofrecemos programas de capacitación integral que te permitirán elevar los conocimientos y las capacidades de tu equipo.

2. Establece un sistema de evaluación

Establece una política de evaluación que garantice la consecución de los objetivos fijados y analiza qué estrategias se pueden utilizar para alcanzar esas metas.

Conforme a la ley, tienes derecho a evaluar el rendimiento del personal y darles retroalimentación sobre sus resultados. Para lograr esto, es importante que desde un inicio establezcas KPIs relevantes para tu equipo, y que definas cada cuánto tiempo medirás el progreso. Estos son los KPIs más relevantes para la gestión del capital humano:

 

  • Niveles de satisfacción de los empleados: Es una medida de lo bien que se sienten tus empleados con su trabajo, la empresa y su cultura. Puede medirse pidiéndoles su opinión mediante encuestas, y utilizando índices de rotación laboral.
  • Cumplimiento de objetivos concretos dentro de tu equipo: La satisfacción de tus empleados es importante, pero también lo es la capacidad que tiene tu equipo para producir en los términos que la empresa necesita. Es por esto que debes enumerar cuidadosamente los objetivos productivos de tu grupo de trabajo, y realizar mediciones periódicas para comprobar cuántos de los objetivos de la lista se cumplieron durante el período determinado.
  • Niveles de compromiso de los empleados: El compromiso de los empleados es la implicación emocional de un empleado en su trabajo, que afecta a la productividad y al rendimiento. Cuanto mayor sea su nivel de compromiso, más probable será que permanezcan en su empresa. Puedes medir el compromiso realizando grupos de discusión o mediante encuestas en las que se formulen preguntas con puntuación como las siguientes «¿Cómo de comprometido te sientes en tu trabajo?»

3. Conoce los objetivos y prioridades de tu compañía

Define los objetivos del departamento de RRHH y las metas a corto y medio plazo (1-3 años). Asegúrate de que tu equipo sepa qué objetivos persigue la empresa. Más allá de los objetivos específicos para cada equipo de trabajo que mencionamos anteriormente, es importante que compartas abiertamente los objetivos a nivel empresarial. El éxito de tu campaña depende en gran medida de lo bien que estos puntos sean comunicados.

4. Emplea sistemas de gestión predefinidos

Además de planear la estrategia de gestión tú mismo, también puedes emplear sistemas y herramientas que pueden ayudarte en la gestión del capital humano. Una de ellas es el modelo llamado Balanced Scorecard (BSC).

Este modelo de administración de redes permite medir la efectividad de una organización en cuanto a su desempeño y visión estratégica. El BSC tiene como objetivo desarrollar y mejorar el rendimiento de los directivos, además de motivarlos para que logren los objetivos planteados por la organización siguiendo una estructura clara y mensurable. 

Gestionar el capital de tu departamento de recursos humanos puede abrirte nuevas puertas para elevar la productividad y conseguir mejores resultados a corto, mediano, y largo plazo. En este artículo, te contamos cómo abordarlo correctamente, y cuáles son las KPIs que tienes que tener en cuenta. Sigue leyendo ? Rotación de personal: ¿Por qué se van tus empleados?



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